Capitulo 3: Adrenalina

Histeria colectiva de una sola persona, mas bien de varias de mis elocuentes personalidades. No se llevan bien, como tampoco la horda de gente que rodea y estorba a una, o varias de mis aparentes vitrinas de chocolate, escaparates de sex-shop o simplemente carnicerias, donde penden como cabezas de chancho, algunas de mis penas, traumas y temores. Solo los gatos pobres, merodean y maullan, o sencillamente se mean en el aserrin que tengo de entrada.

Penas, traumas y temores. Plateada, posta y Lomo. Preferiria develar mi sex, shop con los ultimos juguetes traidos de la Europa Rococo, aquella que habla un perfecto frances y pasa el tiempo adorando el brillo de una corona lustrosa, pero llena de amalgamas por dentro. Ira, desilucion, desencanto; y porfavor, que el resto de perversiones y delirios tome un numero para asegurar su atencion; toda burocracia queda como nudo ciego de corbata postiza.

Quizas si cerrase los ojos, todo esto pasaria. pero despertaria en la rivera opuesta del rio, o peor aun, en una improvisada balsa hacia los rapidos. Toda mi vida es tan aburrida como sentarse a pescar con moscas, o caer desde las "niagara's fall" sin salvavidas.

alguien trajo una camara? no se salta todo los dias de una catarata...